Abstract:
En esta era que podemos considerar como de la segunda revolución científica y de las técnicas modernas; las organizaciones se hallan en plena mutación. Deben adaptarse a nuevas características tecnológica, financieras, políticas y humanas, y a la vez respetar compromisos y exigencias permanentes de las que no pueden despojarse. Esta situación origina cambios cuyo significado es preciso percibir y cuyas consecuencias deben analizarse.
A medida que van desarrollándose las técnicas más avanzadas se producen transformaciones que obligan a definir y a llevar a cabo una renovación constante de procedimientos y sistemas, de materiales y equipos utilizados, de organización y de estructuras, hábitos y objetivos, así como de criterios de eficacia y determinación de las políticas a seguir.