Resumen:
La economía mundial se cambiaría drásticamente sino hubiera corrosión. Los carros, barcos, conductos subterráneos, utensilios domésticos, etc. No requerirían ningún recubrimiento. La pintura sólo tendría un proceso decorativo. La industria del acero inoxidable casi desaparecería, el cobre sólo se utilizaría para aplicaciones eléctricas. La mayoría de los equipos industriales metálicos y de fundición. Pero, las leyes fundamentales de la termodinámica nos demuestran que desafortunadamente, la corrosión es inevitable. La ingeniería de corrosión aplica los fundamentos científicos para prevenir o por lo menos controlar los daños por corrosión y así evitar las importantes pérdidas en materia prima y en equipo a los riesgos de accidente.