Resumen:
Los criterios convencionales en la evaluación de proyectos, suelen limitarse a las dimensiones económica, financiera y social, pero bien sabemos en la realidad de un proyecto intervienen otros factores de naturaleza humana, política, jurídica, ecológica, etc., cuya contribución al éxito o fracaso del proyecto puede ser determinante. Además, cuando el proyecto se convierte en realidad, interactúa con muchos otros proyectos en operación o en gestación, y como resultado de estas múltiples interacciones, tendremos éxitos y fracasos, avances y retrocesos en uno y otro sentido, y en uno y otro proyecto interrelacionado. Todo ello nos habla de la necesidad de efectuar la evaluación del proyecto desde una perspectiva multidimensional y multi-interactiva, que nos permita, aproximarnos a una conclusión certera sobre su viabilidad y conveniencia de realización.