Abstract:
La sucesión cenozoica expuesta en Cosoltepec, Oax., consiste en dos unidades litoestratigráficas informales, una volcanoclástica acumulada en condiciones fluvio-lacustres con un espesor aproximado de 65 m, la cual se propone informalmente como Toba Jagüey, la otra unidad que se propone como Andesita Cosol, consiste en andesitas-basálticas y brechas volcánicas. La Toba Jagüey en la base de la sucesión cenozoica contiene circones magmáticos y biotitas. Los circones se fecharon por el método de Ablación Laser, en 33.57± 0.36 Ma, que representa una edad de formación. Las biotitas se fecharon por el método isotópico de Rb-Sr en 27.3 ± 0.55 Ma, y representan un recalentamiento provocado por el vulcanismo andesítico.
La Toba Jagüey presenta estructuras sinsedimentarias compatibles con una extensión en sentido suroeste-noreste, en la cual se formó un graben. En el hombro suroeste, la Toba Jagüey presenta inclinaciones hasta de 50º y define un arreglo de pequeños bloques imbricados, yuxtapuestos por fallas inversas. El origen de tales estructuras se explica por el empuje que ejerció un primer flujo de andesita, que fluyó hacia el sur, contra el bloque de piso de la falla Cosol suroeste. Los derrames andesíticos subsecuentes cubrieron los bloque imbricados y finalmente la erosión favoreció la exposición de los rasgos descritos.
La extensión en sentido suroeste–noreste es compatible con el entorno tectónico propuesto previamente para el Oligoceno-Mioceno en el Sur de México.